sábado, 23 de febrero de 2013

El cometa Clovis pudo provocar una extinción masiva en América y el fin de los Clovis


 
Los dinosaurios no han sido las únicas víctimas de una roca espacial. Al menos eso piensan los científicos que defienden la hipótesis del cometa Clovis, la cual determina que un gran cuerpo extraterrestre chocó o explotó en Norteamérica hace aproximadamente 12.900 años, lo que desencadenó una extinción masiva de la flora y fauna del continente y un enfriamiento del hemisferio norte. Concretamente, este fenómeno, denominado Younger Dryas, disminuyó los termómetros a 15 grados en algunas regiones y rebajó el nivel del mar decenas de metros. Ya fuera una colisión o una explosión, el suceso habría provocado grandes incendios a lo largo de toda Norteamérica que arrasaron cuanto encontraron a su paso.

 

Clovis, la civilización extinta


El nombre que se otorga al cometa proviene de la población que habitaba entonces el continente. Los restos arqueológicos de los Clovis, que se extendieron desde Canadá a México, desaparecieron de una forma fugaz sin dejar rastro coincidiendo con la fecha que se atribuye a la llegada del cometa. 

La hipótesis considera que los humanos que no sucumbieron víctimas de la explosión y el fuego lo hicieron de hambre al quedarse sin recursos. Además, junto a ellos pereció una megafauna compuesta por mamuts o perezosos gigantes, entre otros animales extintos. Los yacimientos hallados muestran una capa posterior a la época Clovis sin rastro de ocupación o de vida que se prolonga durante cerca de 500 años hasta que vuelven a encontrarse evidencias de población.

 

Avance del hielo

 

El impacto y los incendios también debieron provocar un gran deshielo en la capa glaciar norteamericana. Este fenómeno generó una gran masa de agua dulce que habría ido a parar al Océano Atlántico, donde interrumpió la corriente cálida que circula hacia el polo norte y lo calienta. Esto, a su vez, habría dado lugar al avance del hielo y el súbito enfriamiento, que se prolongó durante cerca de 1.000 años.

Pero no todo lo que trajo consigo el Clovis habría sido malo. La sequía que produjo en Oriente Próximo el Younger Dryas obligó a las poblaciones allí asentadas -agrupadas bajo la denominación de cultura Natufiense- a buscar nuevas formas de subsistencia dada la escasez de alimentos que les ofrecía la caza y la recolección. Así idearon la agricultura, uno de los avances más importantes en la historia de la humanidad. 
Aunque cuenta con defensores la hipótesis del cometa Clovis no es mayoritaria entre la comunidad científica, ya que se considera que no existen suficientes pruebas de la colisión del meteorito. Lo que no se discute es que, de producirse el choque, las consecuencias bien podrían ser las que enumera esta teoría. 

Descubren un cadáver en la cisterna de un hotel por el mal sabor del agua



Las autoridades de Los Ángeles (California) investigan la causa de la muerte de una mujer cuyo cuerpo estuvo más de dos semanas en la cisterna de un hotel, hasta que sus huéspedes se quejaron del extraño sabor del agua del grifo. El misterio que rodea el caso de Elisa Lam, una turista canadiense de 21 años que fue hallada el martes en la cisterna de agua potable del hotel Cecil, aumentó hoy cuando la oficina forense de la ciudad declaró que los resultados de la autopsia son insuficientes para determinar si se trató de un asesinato.

Según informó el diario Los Ángeles Times, los investigadores tendrán que esperar a que concluyan las pruebas toxicológicas, que llevarán entre seis y ocho semanas, para determinar si Lam fue empujada a la cisterna o si fue víctima de un accidente. La Policía local llevaba dos semanas buscando sin éxito a Lam hasta que los residentes del hotel Cecil, donde ella se había alojado, comenzaron a quejarse del sabor extraño del agua.
"El agua del grifo sabía horrible", dijo a la cadena CNN Sabina Baugh, una turista británica que estuvo ocho días en el hotel junto a su esposo Michael. "Tenía un sabor muy raro, como dulce, asqueroso. Muy extraño. Casi no puedo describirlo", añadió. Como los Baugh, el resto de huéspedes bebieron, se lavaron los dientes y se ducharon con el agua del hotel, hasta que algunas quejas provocaron que el equipo de mantenimiento del edificio subiera al tejado para comprobar el estado de la cisterna, donde encontró el cadáver de Lam.
Tras el hallazgo, el Departamento de Salud Pública del condado emitió una orden de prohibición de beber el agua del hotel, que debió cortar el suministro de la misma excepto para los retretes. No obstante, un análisis del agua proveniente de la cisterna determinó que no contenía bacterias dañinas para la salud, según dijo hoy a la cadena NBC el director de salud medioambiental del citado departamento, Angelo Bellomo.

"Es probable que la cisterna tuviera el cloro suficiente para destruir cualquier bacteria que pudiera haber estado presente" debido al cuerpo, señaló Bellomo. Según Michael Baugh, pese a los análisis del agua, saber que el cuerpo de Lam estuvo en la cisterna "te hace sentir físicamente enfermo, pero sobre todo lo sientes psicológicamente. Lo piensas y no es bueno", indicó a la CNN.